Eugène-Emmanuel Viollet-le-Duc

El arquitecto francés Eugène-Emmanuel Viollet-le-Duc ha pasado a la historia como uno de los primeros y más importantes restauradores de monumentos. Tendría oportunidad de intervenir en grandes conjuntos religiosos y civiles pero, de entre todos sus trabajos como arquitecto y como restaurador de monumentos, habría que destacar aquellos relacionados con el mundo de los castillos y con la arquitectura militar, campo que Viollet-le-Duc cultivó durante toda su vida con una especial pasión.

Entre sus obras de arquitectura en este ámbito podemos destacar la construcción del Château d’Abbadia en Hendaya (1860-1870), el de Tertre d’Ambrières (Mayenne), el de Pupetières (1861) y el de La Flachère (1863), en del departamento de Rhône-Alpes. Sin embargo, serían sus investigaciones y sus intervenciones en los castillos de Coucy (1856-66), Pierrefonds (1858-1879), Montdardier (1860) y Roquetaillade (1864) y, sobre todo, sus importantes trabajos en el conjunto de Carcasona (1855-1879), los que convirtieron a Viollet-le-Duc en una de las autoridades más importantes de su tiempo y en una fuente inagotable de material para la investigación en este campo del conocimiento.